Jóvenes modifican sus vapeadores sin saber que ponen en riesgo su salud
- Redacción Qhali
- 6 ago
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Un estudio reveló que más del 80 % de adolescentes y adultos jóvenes que vapean alteran sus dispositivos, lo que puede provocar quemaduras, intoxicaciones e incluso explosiones.


Un hábito que muchos ven como inofensivo podría estar ocultando riesgos mucho más serios. Investigadores de la Universidad Estatal de Georgia analizaron el comportamiento de los usuarios de cigarrillos electrónicos y descubrieron que un 84 % de los jóvenes que vapean ha realizado algún tipo de modificación en sus dispositivos. Lo alarmante es que muchas de estas alteraciones se hacen sin tener idea del impacto que pueden tener sobre la salud o la seguridad física.
Alteraciones frecuentes y peligrosas
Una de las intervenciones más comunes es la modificación del e-líquido, el líquido que se calienta en los cigarrillos electrónicos para producir el vapor que se inhala. Este puede contener nicotina, saborizantes, propilenglicol y otras sustancias. Según el estudio, el 68 % de los adolescentes y el 61 % de los adultos jóvenes reconoció haber cambiado este líquido, ya sea mezclando sabores, elaborando fórmulas caseras o añadiendo marihuana o nicotina, lo cual puede aumentar la exposición a químicos peligrosos.
También se reportó que muchos usuarios alteran las bobinas de calentamiento, ya sea limpiándolas, reemplazándolas o fabricando una de forma casera. Estas prácticas fueron comunes en el 64 % de los adolescentes y el 61 % de los adultos jóvenes participantes del estudio, y pueden comprometer directamente el funcionamiento del dispositivo.
“Muchos usuarios no se dan cuenta de los peligros potenciales de modificar los cigarrillos electrónicos”, señaló Lucy Popova, profesora asociada de la Facultad de Salud Pública de la Universidad Estatal de Georgia.
Desconocimiento sobre los riesgos

Una de las modificaciones más riesgosas es el cambio de batería. Cerca del 40 % de los vapeadores jóvenes admitió haberlo hecho, sin saber que una batería manipulada puede generar sobrecalentamientos, incendios o explosiones. Casos de este tipo ya han sido registrados en estudios previos, que indican que más de 2,000 personas terminaron en emergencias entre 2015 y 2016 por estas causas.
“Cuando las personas ajustan el voltaje de un dispositivo o agregan sustancias al líquido, pueden aumentar su exposición a sustancias químicas nocivas como los metales pesados”, declaró la especialista.
El estudio también pone en evidencia una gran brecha de información. Aunque existen campañas que alertan sobre los efectos nocivos del vapeo, aún no se habla lo suficiente sobre los peligros de modificar los dispositivos. Los especialistas advierten que se necesita una mayor educación al respecto, especialmente entre los más jóvenes, que suelen experimentar con sus vapeadores sin medir las consecuencias.
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