Cómo el contacto físico (o la falta de él) influye en tu estado de ánimo y autoestima
- Deborah Astengo
- hace 7 horas
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Su ausencia, en cambio, puede generar ansiedad, tristeza e incluso síntomas depresivos.
Foto: Freepick
El tacto es uno de los primeros sentidos que se desarrolla en el ser humano y es fundamental para la conexión emocional. Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) sostienen que el contacto físico activa zonas del cerebro asociadas al placer, la seguridad y la regulación emocional .
La neurocientífica Tiffany Field , directora del Touch Research Institute en la Universidad de Miami, afirma que “ el contacto físico estimula la liberación de oxitocina , conocida como la hormona del vínculo, y reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés”.
Cuando falta el contacto: ansiedad, depresión y baja autoestima
Estudios recientes, como el publicado por The Journal of Social and Personal Relationships , han demostrado que la ausencia prolongada de contacto físico puede provocar síntomas de ansiedad, depresión y sentimientos de soledad crónica , especialmente en jóvenes y adultos mayores.
En Perú, un estudio de la Universidad Peruana Cayetano Heredia reveló que durante la pandemia por COVID-19, el 62% de los encuestados manifestó una disminución en su bienestar emocional debido a la falta de contacto físico con seres queridos .
“El ser humano necesita sentir cercanía. El contacto físico saludable refuerza la sensación de pertenencia, autoestima y contención emocional ”, explica la psicóloga clínica Shirley Gómez , especialista en salud mental con más de 15 años de experiencia. “En consulta, hemos visto cómo la carencia de este tipo de afecto puede influir negativamente en la imagen que una persona tiene de sí misma”.
Contacto físico: más allá de lo romántico
El contacto físico no solo se limita a las relaciones de pareja. Un abrazo entre amigos, una mano en el hombro o una caricia familiar también tienen efectos positivos comprobados . En culturas como la japonesa o la escandinava, donde el contacto es más limitado, han surgido iniciativas terapéuticas como la “terapia de abrazos” o sesiones de masajes conscientes para suplir esa necesidad emocional.
Según la Sociedad Británica de Psicología , incluso las interacciones físicas breves pueden disminuir la presión arterial, mejorar el estado de ánimo e incrementar la sensación de autoestima en personas con baja confianza o que enfrentan situaciones estresantes.
Cómo incorporar más contacto físico positivo en la vida cotidiana
Abrazar conscientemente a las personas cercanas, por al menos 20 segundos, para activar la liberación de oxitocina.
Practicar técnicas de automasaje o mindfulness corporal para reconectar con uno mismo.
Incluir prácticas terapéuticas como la danza, el yoga con contacto o el masaje terapéutico.
Permitir la expresión emocional física en familia y con amistades, dentro de límites sanos y consensuados.
“El cuerpo también habla, y muchas veces lo hace mejor que las palabras”, afirma Gómez. " Una mano extendida o un abrazo pueden comunicar aceptación, consuelo o apoyo profundo. Y eso influye directamente en la forma en que nos sentimos valorados y amados ".
La evidencia científica y la experiencia clínica coinciden en algo esencial: el contacto físico es parte fundamental del bienestar emocional y del desarrollo de una autoestima saludable.