El impacto de los “likes fantasma” en tu dopamina y autoestima
- Deborah Astengo
- hace 1 día
- 2 Min. de lectura
Aunque no lo notemos, recibir o no recibir reacciones en redes sociales puede activar o disminuir nuestro sistema de recompensa cerebral.
Foto: Freepick El término “likes fantasma” hace referencia a las interacciones digitales que no generan una verdadera conexión emocional, como los “me gusta” automáticos, generados por bots o incluso por personas que no interactúan genuinamente con el contenido. Estos “likes” alimentan una ilusión de aprobación, pero en muchos casos no representan un vínculo real, ni implican reconocimiento auténtico.
Según un informe de The Wall Street Journal, algunos usuarios en Instagram o TikTok reportan sentirse vacíos incluso cuando sus publicaciones obtienen cientos de likes, al notar que muchas de estas interacciones no provienen de personas cercanas ni generan conversación.
Dopamina: el neurotransmisor detrás de la gratificación inmediata
Cada vez que recibimos una notificación positiva en redes, el cerebro libera dopamina, el neurotransmisor relacionado con la recompensa, el placer y la motivación. Esta reacción química es similar a la que se activa con la comida, el sexo o el juego.
“Las redes están diseñadas para generar una retroalimentación positiva constante, pero artificial”, advierte la neurocientífica estadounidense Anna Lembke, autora del libro Dopamine Nation. “El problema es que cuanto más frecuente es esta gratificación inmediata, más difícil se vuelve experimentar placer con estímulos reales o sostenidos.”
En otras palabras, la dependencia a los “likes” puede crear una tolerancia dopamínica, haciendo que necesitemos más interacciones para sentir lo mismo, y que nos sintamos decaídos o insuficientes cuando no las obtenemos.
En Perú: la validación digital también pasa factura
En el contexto local, la presión por ser visible y validado en redes sociales ha generado nuevos motivos de consulta en adolescentes y jóvenes adultos. La psicóloga clínica peruana Zulita Dioses explica que “estamos viendo casos donde la autoestima fluctúa radicalmente según el rendimiento digital de una publicación. Cuando una foto no tiene los ‘likes’ esperados, la persona interpreta que no vale o no es suficiente.”
Dioses señala que esta lógica de validación inmediata puede afectar procesos de identidad, generar ansiedad social y dificultar la autoestima estable, especialmente en etapas de formación personal.
¿Cómo proteger tu autoestima en tiempos de “likes” artificiales?
Algunas estrategias clave para navegar el mundo digital sin comprometer tu bienestar emocional:
Distingue entre interacción real y validación vacía: no todos los likes son reconocimiento auténtico.
Cuestiona tu intención al publicar: ¿estás compartiendo algo porque te representa o porque esperas aprobación?
Haz pausas digitales conscientes: limitar el tiempo en redes ayuda a reconectar con tu identidad fuera del algoritmo.
Fomenta relaciones fuera de línea: la conexión cara a cara sigue siendo el ancla emocional más poderosa.
Valida tus logros por su proceso, no por su reacción en redes.
El futuro digital: ¿más autenticidad o más dopamina?
Aunque las plataformas han incorporado herramientas para ocultar los “likes” o priorizar contenido de interés real, el diseño sigue incentivando la respuesta rápida, cuantificable y muchas veces superficial.
Estudios de la Universidad de Pittsburgh y de la Universidad de Lima coinciden en que el uso intensivo de redes sociales se correlaciona con mayores niveles de ansiedad, comparación social y síntomas depresivos, especialmente cuando se utiliza como termómetro emocional.