top of page

El estigma: un enemigo silencioso de la salud mental

  • Una etiqueta social hacia la salud mental que no solo discrimina, también enferma. Sentirse juzgado o incomprendido puede intensificar el malestar emocional y alejar a las personas del apoyo que necesitan.

El estigma social puede enfermar la mente
FreePik
sdds

Cuando hablamos del estigma mencionamos una posible tortura para quienes ya conviven con un trastorno mental, también puede ser el detonante del mismo. A pesar de que cada vez se habla más sobre salud mental, persisten estereotipos que la distorsionan para muchos. Estos prejuicios no solo impiden hablar con libertad del sufrimiento, sino que además pueden desencadenarlo.


El estigma como factor de riesgo


El estigma social es la desvalorización de alguien por una característica considerada indeseable. En temas de salud mental, estas actitudes pueden generar exclusión, silencio y desconfianza. Puede venir de desconocidos, pero lamentablemente también de quienes están más cerca: amigos, parejas o familiares.


“En el contexto de la salud mental, el estigma se manifiesta a través de prejuicios, actitudes negativas y comportamientos discriminatorios hacia quienes padecen trastornos mentales” escribe Javi Soriano, psicólogo graduado en Psicología por la Universidad de Valencia, para Psicología y Mente.

Vivir bajo un entorno hostil, donde el sufrimiento emocional es normalizado o ridiculizado, genera un estrés crónico que por sí solo puede desencadenar trastornos mentales. El estigma no solo agrava: puede dañar la salud mental.


“El estigma social no solo agrava los trastornos mentales existentes, sino que también puede ser un factor que contribuya a su aparición. Vivir constantemente bajo el peso de la discriminación, el rechazo y la falta de comprensión genera un estrés emocional crónico que puede desencadenar problemas psicológicos”, comenta Javi Soriano.

El resultado es un círculo vicioso: quien sufre calla por vergüenza o miedo, no pide ayuda, su malestar se agrava y cuando finalmente se atreve a comunicar sus emociones y pensamientos, puede encontrarse con la incomprensión de la sociedad. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la prevalencia de depresión ha aumentado significativamente, pero muchas personas siguen sin recibir tratamiento por temor al ‘qué dirán’.


El estigma social puede enfermar la mente
FreePik

Empatía como forma de prevención


Figuras públicas como Anthony Hopkins, J. K. Rowling, David Beckham o Emma Stone han hablado abiertamente sobre sus propios procesos con respecto a trastornos mentales, lo que deja ver que nadie está libre de experimentarlos.


"¿De qué hay que avergonzarse? Pasé por una época muy difícil y estoy muy orgullosa de haberla superado", declaró J. K. Rowling, escritora, productora de cine y guionista británica, conocida por ser la autora de la serie de libros Harry Potter, al Sunday Times de Londres.

Validar el sufrimiento emocional, promover espacios seguros y normalizar la búsqueda de ayuda profesional son pasos clave para construir una sociedad más consciente y compasiva, porque cuando se deja de juzgar, se empieza realmente a sanar. Romper el estigma que rodea a la salud mental no es solo una cuestión de salud pública, sino de empatía.


“Es fundamental promover una cultura de empatía, información y apoyo, donde se valore la salud mental tanto como la física y se eliminen los estereotipos que alimentan el estigma y el sufrimiento de millones de personas” concluye Javi Soriano.

Comentarios


bottom of page