Hipersensibilidad emocional”: ¿súper poder o sobrecarga mental?

• Ser emocionalmente sensible puede ser una fortaleza poderosa en ciertos contextos, pero también una fuente de agotamiento cuando no se gestiona adecuadamente.

  

  
  

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La hipersensibilidad emocional se refiere a una respuesta emocional más intensa frente a estímulos que para otros podrían parecer neutros o poco significativos . Las personas altamente sensibles (PAS), término acuñado por la psicóloga estadounidense Elaine Aron , tienden a experimentar con mayor profundidad tanto las emociones propias como las de los demás.

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  Esta condición no es un trastorno, sino un rasgo de personalidad que afecta aproximadamente al 20% de la población, según estudios publicados en la Journal of Personality and Social Psychology .

  
  

  ¿Súper poder o vulnerabilidad emocional?

  
  

  Las personas hipersensibles suelen destacarse por su empatía, intuición y creatividad. Sin embargo, también pueden sentirse fácilmente abrumadas, experimentar ansiedad o caer en estados de agotamiento emocional si no se establecen límites claros.

  
  

  “La hipersensibilidad emocional puede convertirse en un don cuando se trabaja desde el autoconocimiento y la autorregulación emocional”, explica la psicóloga clínica peruana Shirley Gómez , especialista en salud mental y bienestar emocional. “ El problema no está en sentir mucho, sino en no saber cómo gestionar eso que sentimos ”.

  
  

  La doctora Gómez añade que el contexto cultural y familiar influye en cómo se percibe la sensibilidad emocional , especialmente en países como Perú, donde aún persisten mitos como que "ser fuerte es no mostrar emociones".

  
  

  La ciencia detrás de sentir más

  
  

  Desde el punto de vista neurológico, las personas hipersensibles presentan una mayor actividad en regiones del cerebro vinculadas al procesamiento emocional, como la amígdala y la ínsula , según investigaciones de la Universidad de California, Santa Bárbara .

  
  

  Asimismo, estudios del Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas y del Cerebro Humano han encontrado que los cerebros de las PAS tienden a procesar más información sensorial y emocional, lo cual puede generar saturación si no se establecen pausas o rutinas de autocuidado .

  
  

  En Perú: sensibilidad en un entorno emocionalmente exigente

  
  

  En una sociedad marcada por el estrés urbano, la inestabilidad económica y los conflictos interpersonales, la hipersensibilidad puede convertirse en una sobrecarga emocional . El Ministerio de Salud del Perú ha reportado un aumento significativo de casos relacionados a ansiedad y depresión pospandemia, donde la falta de espacios de contención emocional ha afectado especialmente a los jóvenes.

  
  

  “La presión social por encajar o rendir emocionalmente en entornos laborales o familiares, hace que muchos repriman su sensibilidad”, comenta Gómez. “ Eso puede generar cuadros de angustia crónica o disociación emocional ”.

  
  

  Estrategias para transformar la hipersensibilidad en fortaleza

  
  

  • Identificar los detonantes emocionales y establecer límites saludables.

  • Practicar técnicas de autorregulación como la respiración consciente o la escritura emocional.

  • Buscar espacios seguros para expresarse , ya sea en terapia, grupos de apoyo o redes afectivas cercanas.

  • Transformar la sensibilidad en creatividad o propósito social , como hacen muchos artistas, terapeutas y cuidadores.

  • Validar y aceptar la emoción sin juicio , entendiendo que sentir intensamente también es parte de una vida auténtica.

    
    

  Sensibilidad bien gestionada: una aliada en tiempos complejos

  
  

  “En tiempos donde el mundo necesita más empatía, conexión y humanidad, la sensibilidad no es un defecto, sino una capacidad que debemos aprender a proteger y canalizar”, concluye Shirley Gómez. “ Ser hipersensible puede ser un superpoder, siempre que uno aprenda a cuidarse primero a sí mismo ”.

  
  

  Reconocer, aceptar y fortalecer la hipersensibilidad emocional puede convertirse en una vía poderosa para cultivar relaciones más auténticas.